jueves, 31 de mayo de 2018

Estreno recomendado: Una hermana

Hoy se estrenó Una hermana, film dirigido por Sofía Brockenshire y Verena Kuri, a partir de relatos de Selva Almada.

Protagonizada por Sofía Palomino (perfecta en su papel), la película narra la búsqueda que provocada la desaparición de una mujer joven en un pueblo de la provincia de Buenos Aires. Una película concisa, dura, necesaria. Hay que verla.





Una hermana se exhibe en la sala BAMA (Diagonal Norte 1150) a las 13.50 y 21.10 hs. Desde el jueves 14 de junio el film también podrá verse en el cine Gaumont.

martes, 29 de mayo de 2018

"Las cinéphilas" llega a la sala Lugones

Este jueves 31 de mayo se estrena en la Sala Lugones el documental Las cinéphilas, ópera prima de la realizadora argentina María Álvarez. La película narra la historia de seis mujeres, habitantes de distintos países (Uruguay, España, Argentina), para quienes ir al cine representa una necesidad cotidiana, un impulso vital, una pasión que las conecta con los recuerdos. 

Así describe su proyecto la directora María Álvarez: “Más allá del amor por las películas, me interesaba el cine como lugar de contención de la soledad y el paso del tiempo. El cine como “cita” que motiva a estas señoras muy mayores a vestirse y salir de sus casas para estar en un lugar a determinada hora. ¿Qué harían ellas si no hubiese salas de cine? No quería hacer un documental sobre películas. Las películas y el cine son dos cosas distintas. Y el cine es una (gran) excusa para contar otra cosa.”

Las cinéphilas tuvo su premier mundial en el Bafici del año pasado, donde obtuvo el Premio del público a la Mejor Película en la Competencia Oficial Argentina. El film será exhibido del jueves 31 de mayo al viernes 8 de junio, a las 19 hs., en la sala Leopoldo Lugones del Teatro San Martín (Av. Corrientes 1530). ¡No se la pierdan!

Junto a la función de las Las cinéphilas, la sala ha programado una selección de cuatro títulos emblemáticos de autores internacionales que son mencionados por las protagonistas del film: Los 400 golpes, de François Truffaut, Hiroshima Mon Amour, de Alain Resnais, Gritos y susurros, de Ingmar Bergman, y Escape en tren, de Andrei Konchalovsky.

El precio de las localidades es de 40 pesos (20 para estudiantes y jubilados). Para conocer más detalles sobre las películas y horarios de las funciones, pueden consultar el sitio web del Teatro.

sábado, 26 de mayo de 2018

Siempre en presente


Por Eric Rohmer* 

"Creo que la imagen cinematográfica debe estar siempre en presente y que no se puede confundir una imagen real con una imagen virtual que sólo existe en la mente. No se pueden confundir imaginación y percepción. La imagen del cine es el presente, porque la cámara no puede examinar los detalles que uno no ve. Desde el punto de vista filosófico, soy contrario a la expresión del pasado en el cine. Me interesa mucho más tratar de visualizar lo invisible a través de lo visible que tratar en vano de visualizar lo invisible. El pasado no se puede ver y, para mí, tampoco se puede filmar."


*En una entrevista publicada en la revista Dirigido (Noviembre de 2004).

La imagen pertenece al film La rendez-vous de Paris (Tres encuentros en París), de Rohmer.

jueves, 24 de mayo de 2018

El arte de envejecer

Por Ricardo Piglia *

David Simon, el creador de la serie The Wire, es un gran narrador social. Incorpora a la intriga policial los hechos del presente (la economía de ajuste de Bush, la manipulación de las campañas políticas, la legalización de la droga). En el capítulo-piloto de Treme, su nueva serie de televisión que vi la otra noche, el marco es Nueva Orleáns después de Katrina: nunca los desastres son naturales, esa es la poética de Simon. La narración social se ha desplazado de la novela al cine y luego del cine a las series y ahora está pasando de las series a los facebooks y a los twitter y a las redes de Internet. Lo que envejece y pierde vigencia queda suelto y más libre: cuando el público de la novela del siglo XIX se desplazó hacia el cine, fueron posibles las obras de Joyce, de Musil y de Proust. Cuando el cine es relegado como medio masivo por la televisión, los cineastas de Cahiers du Cinéma rescatan a los viejos artesanos de Hollywood como grandes artistas; ahora, que la televisión comienza a ser sustituida masivamente por la Web, se valoran las series como forma de arte. Pronto, con el avance de las nuevas tecnologías, los blogs y los viejísimos emails y los mensajes de texto serán exhibidos en los museos. ¿Qué lógica es esta? Sólo se vuelve artístico –y se politiza– lo que caduca y está “atrasado”. 

* Fragmento del texto "El perro ciego. Notas de un diario", publicado en la Revista Ñ del diario Clarín (12/02/11). (En la imagen: el adorable Bubbles en The Wire).

miércoles, 23 de mayo de 2018

Fraternidad


“La conciencia femenina se va construyendo y el feminismo se hace con los hombres. Hacemos lo que podemos con la realidad. El cine viene de la vida y es por eso por lo que todo mi cine viene de mi vida como mujer, pero también como ciudadana, como madre o abuela. Todo lo que está en la vida se puede transformar y más en este mundo que es un caos y un horror. Yo no busco éxitos comerciales ni dinero con mi cine, lo que quiero crear como artista son vínculos y sentimientos de fraternidad y ternura entre la gente”.

Agnès Varda
En una entrevista publicada en el diario "El País", de Madrid (25/09/17). Ir al texto completo.

En la imagen: Visages, Villages, maravillosa película que Varda co-dirigió junto a J.R.

martes, 22 de mayo de 2018

Tercera edición de EPA Cine - Festival de Cine de El Palomar

Con la proyección -con entrada gratuita- del documental Piazza Vittorio, de Abel Ferrara, comenzará este miércoles 23 de mayo la tercera edición EPA CINE, el Festival Internacional de Cine Independiente de El Palomar. 

EPA es una muestra que se propone descentralizar la difusión cinematográfica. Busca generar un encuentro a partir de la exhibición audiovisual en el conurbano bonaerense para que películas independientes, nacionales e internacionales, puedan lograr otros espacios donde proyectarse y así crear nuevos diálogos y públicos.

El festival se desarrollará hasta el domingo 27 y tiene como sedes principales al Cine Teatro Helios, ubicado en Ciudad Jardín (Bv. General San Martín 3076, El Palomar) y el auditorio de la UNTREF (Valentín Gómez 4752, Caseros).

EPA está integrado por una sección competitiva (donde sobresalen películas como Milla, Las expansiones y Did you wonder who fired the gun?); un panorama internacional de largometrajes (donde se destacan Teatro de Guerra, No intenso agora y The impossible image); una selección de trabajos experimentales; un foco de cine infantil; una foco “Rescate” con dos obras del documentalista argentino Jorge Prelorán; y una retrospectiva dedicada al gran cineasta turco Nuri Bilge Ceylan.

También debemos mencionar un acontecimiento que ya se convirtió en una marca de este festival: la proyección especial con música en vivo de una película muda. Este año la elegida es una película argentina de 1929: La quena de la muerte, de Nelo Cosimi. Este film fue filmado por Cosimi junto a su equipo en distintas locaciones de Córdoba, y narra una historia centrada en dos parejas cuyos distintos contextos socioculturales traerá resultados anunciados en la melodía de una quena.

Las entradas para las funciones tienen precios accesibles, incluyendo proyecciones con entrada gratuita. Para más detalles sobre el festival, las películas programadas y las actividades pararelas, pueden consultar la página de Facebook del festival y el sitio oficial, en donde encontrarán el catálogo y la grilla de programación.

lunes, 21 de mayo de 2018

Mar adentro


- ¿Qué te duele?
- Todo... me duele todo.

El Pampero, de Matías Lucchessi.

domingo, 20 de mayo de 2018

Subtexto


Por Jaime Rosales*

El subtexto es algo de lo que se habla frecuentemente entre directores, actores y guionistas. El subtexto no se manifiesta en las palabras. Tiene que ver con el deseo. Es aquello que revela el deseo por encima —o por debajo, si se prefiere— de las palabras.

El subtexto no está en el guión. El subtexto no lo crea el guionista. Consiste en ir, precisamente, contra el texto de la escena. En el cine, el subtexto se basa en la mirada del actor. El subtexto no es otra cosa que decir «te quiero» con una mirada de odio; o decir «te odio» con una mirada de amor. El subtexto es lo que diferencia una obra leída de una obra vista. El actor es la herramienta básica creadora de subtexto.

*Fragmento de su libro “El lápiz y la cámara”. (Ed. La huerta grande).

La imagen pertenece a "Hermosa Juventud", muy buena película de Jaime Rosales.

viernes, 18 de mayo de 2018

20º BAFICI - Un tal Eduardo: un diálogo con el director Aldo Garay


Un tal Eduardo (Uruguay, 2018)
Dirección: Aldo Garay
Sección: Competencia Latinoamericana

Después de sorprendernos en 2015 con El hombre nuevo, excelente film ganador de la edición de ese año del Festival LGBTIQ Asterisco, el cineasta uruguayo Aldo Garay estuvo en abril en Buenos Aires para acompañar la presentación de su más reciente documental, Un tal Eduardo, que participó en la Competencia Latinoamericana del Bafici. Con él conversé durante el festival.


La película tiene en su centro a Eduardo Franco, líder de Los Iracundos, un grupo de música melódica que tuvo mucho éxito en los años ‘70 y ‘80, en Uruguay y en Paraguay especialmente. Franco murió en 1989, cuando sólo tenía 43 años, desaparición temprana que sin dudas alimentó la leyenda. Pero así como en Argentina sabemos enseguida a quién nos referimos cuando decimos “Diego”, esa identificación no es tan automática en el caso de este cantautor, a pesar de su popularidad. Así lo explica el realizador: “Eduardo podría parecer un personaje amable, menor, donde no hay un gran conflicto. Incluso hay un juego que intentamos incluir en el mismo título de la película. Si vos presentás el título 'Un tal Eduardo' en Uruguay y le preguntás a la gente qué Eduardo puede ser, y sólo das la pista de que es un artista, seguramente te van a decir Eduardo Galeano, Eduardo Mateo o Eduardo Darnauchans. Eduardo Franco no va a ser una de las primeras opciones.” Sin embargo, Franco fue un ídolo para muchísimas personas que aún hoy lo siguen y agradecen sus canciones. Un ídolo humilde, quizás. El director construye la película desde ese lugar: “Para el documental hay que estar atento al detalle más insignificante. Ésa es una de las cosas que más me seducen de Un tal Eduardo.” 

El cineasta montevideano venía de hacer El casamiento y El hombre nuevo, dos películas con historias de vida difíciles, con personajes marcados por la lucha y la tristeza. En comparación, Un tal Eduardo se impone claramente como un film más luminoso, y parece que fuimos varios los que quisimos indagar en este cambio de tono. “Es una pregunta pertinente y al mismo tiempo recurrente”, sugiere el director, y reflexiona: “En realidad no siempre se puede ser grave, y por otro lado también tiene que ver con una determinada búsqueda. En el caso de Eduardo, se trata de una persona que fue y sigue siendo muy conocida, pero en la película es una ausencia. Entonces la mejor forma de llegar a esa humanidad y a ese legado es a través de una coralidad de otras personas, que a su vez dentro del relato también cobran carácter de personajes. Y ahí es donde creo que está la búsqueda documental en sí: empezar en un lugar y terminar en otro, con todos ellos, junto a todos ellos. Yo no tengo la capacidad de anticipar si a una película le voy a dar un tono más grave o menos grave, sino que las mismas circunstancias fueron girando hacia la comedia en algunas de las situaciones en donde se evoca la figura de Eduardo.” 

 

Fanáticos, amigos, imitadores, la esposa de Franco, su hija Giselle, un sacerdote que le rinde homenaje, un curioso peluquero, un escultor simpatiquísimo, un médium que afirma haber sido el “canal” para los mensajes enviados desde el más allá (“Eduardo ahora está en la octava dimensión”)… todas estas voces van trazando el retrato del músico, mientras como espectadores tenemos la impresión de contemplar un paisaje detenido en el tiempo. Todo remite a otra época: las calles, los colores, la vestimenta, los pósters, los objetos, los sonidos, los espacios interiores. Si no fuera por una estatua en honor a Hugo Chávez (protagonista de una escena desopilante en el film), podría creerse que a ese microcosmos aún no llegaron los años ‘90. “Ese registro está totalmente buscado -asegura el realizador-. Además ayuda el escenario, porque Paysandú es una ciudad anacrónica. La peluquería, por ejemplo. Podría decirse que hay un diseño de arte en ese lugar, pero no. Ese arte está ahí, es un arte vivo. Yo desafío a cualquier director de arte a armar esa peluquería. También están los televisores viejos o el hecho de escuchar grabaciones de radio. Hay muchas referencias de la radiofonía y de la televisión uruguayas de la épocas. Están los vinilos y hasta la forma en que la gente se viste. Tenemos las tapas de los discos, con su iconografía, las remeras que se imprimían con esos diseños, la tipografía que usamos en los créditos. E incluso hay una referencia al cine argentino de los '70 y los '80, como las películas de Palito Ortega. Fue deliberado jugar con todo eso.”


En la película circulan muchas reproducciones de Eduardo, en fotos, afiches, esculturas, tapas de discos, aunque recién en el último tramo del film surge el material de archivo que muestra al músico en acción. “En los primeros cuarenta minutos -apunta Garay- la figura de Eduardo es fantasmagórica. Está en todos lados pero a la vez no está. Y luego empieza a tomar cuerpo. Toma cuerpo con el discurso y lo hace casi con el mismo registro que los demás personajes, en donde vemos que el azar y la vida lo ponen en situaciones particulares. Como cuando cuenta, por ejemplo, que él escribió la canción Puerto Montt sin haber ido nunca a Puerto Montt”.

La cuestión es colmar un vacío. O mejor dicho: aferrarse a algo que le permita al sujeto efímero vincularse con alguna forma de trascendencia. Dice el director: “Creo que la película habla de un montón de cosas, sobre todo de la idiosincrasia que tiene Uruguay, de los matices que tiene Uruguay como sociedad. Por ejemplo, se dice que Uruguay es un país ateo y laico. Sin embargo, la gente cree en todo. Hay una necesidad de creer en todo.” Aunque en esta película no se trata sólo de creer, sino también de recordar. No puedo dejar de pensar en Coco, la hermosa película de Pixar, y en la importancia de ese venerado altar con fotos y recuerdos que habilitan la visita anual del espíritu de los muertos. Un tal Eduardo -y sus encantadores altares- es documento fehaciente de que la memoria del líder de Los Iracundos tiene la perdurabilidad más que garantizada.

jueves, 17 de mayo de 2018

Comenzó una nueva edición del Festival Internacional de Cine Político

Hoy comenzó la octava edición del Festival Internacional de Cine Político de Argentina (FICiP), muestra que se extenderá hasta el miércoles 23 con proyecciones y actividades en diversas salas de la ciudad de Buenos Aires, con una programación que promete excelentes películas. 

“En cada edición -dicen los organizadores- intentamos brindarle a la sociedad, una herramienta más, para actuar en la vida política-ciudadana desde otro lugar y así poder comprender las luchas y logros de tantos pueblos que se expresan a través de las artes audiovisuales.” La entrada es gratuita. 

Este año podrán verse más de 100 producciones provenientes de 30 países. En esta edición el festival hará foco en la “Comunicación como Derecho”, por eso la película elegida para la apertura es The Cleaners, (2018), de Hans Block y MoritzRiesewieck, vinculada a la industria fantasma de la limpieza digital, en donde Internet se libera del material no deseado. Dentro de esta temática también se verán, entre otros títulos, el film Derechos Humanos, de Ignacio Ibarra, sobre el trabajo de los fotógrafos durante la última dictadura militar argentina, y el documental español Tiempos de Post Verdad. Nosotros somos medios, de Héctor Carré.

Otros títulos que quiséramos destacar son tres películas relacionadas con la problemática de las migraciones, como Irioweniasi, El hilo de la luna (España), Mekong- Paraná: Los últimos laosianos (Argentina), y el cortometraje mexicano El muro adentro. Y también vale prestar atención a las producciones que llegan desde Brasil, como la ficción Piscina, de Leandro Goddinho, y el documental El Dedo en la Herida, en donde Silvio Tendler intenta pensar cómo la lógica del capitalismo financiero arrasó con el Estado de Bienestar. Del director Silvio Tendler, que será uno de los invitados en esta edición del FICIP, ya habíamos reseñado aquí su film Utopía y Barbarie.

El director argentino Fernando Birri, fallecido a fines del año pasado, será protagonista de un foco en su homenaje, donde se proyectarán sus películas El siglo del viento y Remitente Nicaragua, además del documental que Romina Yenni le dedicó al realizador: BirriLata, Una vuelta en tren.

Esto es solo un brevísimo punteo del FICIP. Hay muchísimas películas para descubrir, y el sitio web permite recorrer la programación y leer las sinopsis de la películas de forma muy clara. Vayan a la página, busquen la pestaña “Programación” y elijan “Grilla completa”. Allí tendrán la lista de todas las películas, junto a la indicación de sala y horario en que se proyecta cada una. 

Ir a la página web del FICIP.

martes, 15 de mayo de 2018

Ojos como lagos


«Al agrandarse monstruosamente sobre la pan­talla, una cara debe ser tratada como un paisaje, con su relieve de luz y sus depresiones tenebrosas. Se debe mirar como si los ojos fueran lagos, la nariz una montaña, las mejillas praderas, la boca un campo de flores, la frente un cielo y los cabellos nubes».

Josef von Sternberg 
(Citado por Román Gubern en su libro "Historia del Cine")

En las imágenes: Un beau soleil intérieur (2017), de Claire Denis.

domingo, 13 de mayo de 2018

Help me... I'm fading


Fearless people 
careless needle
Harsh words spoken 
and lives are broken


Forceful aging 
help me I'm fading
Heaven's waiting 
it's time to move on


Crossing that bridge with lessons I've learned
Playing with fire and not getting burned
I may not know what you're going through
But time is the space between me and you


There is a light through that window
Hold on say yes while people say no

Life carries on
It goes on

Seal 
(“Praying for the dying”)

Las imágenes pertenecen al film Morvern Callar (2002), dirigido por Lynne Ramsay.

miércoles, 9 de mayo de 2018

Festival "Construir Cine": el cine piensa el mundo del trabajo... y su futuro.

Este jueves 10 de mayo comienza la quinta edición de Construir Cine, un festival internacional dedicado a pensar la representación del trabajo en el cine, que este año ha reunido 35 largometrajes y 30 cortos, procedentes de más de 20 países. La muestra se extenderá hasta el miércoles 16 de mayo y tendrá tres sedes, la sala Gaumont (Av. Rivadavia 1635), el Centro Cultural San Martín (Sarmiento 1551) y el Cine York – Centro Cultural Olivos (Juan Bautista Alberdi 895, Olivos).

Todas funcionas tienen entrada gratuita. Las localidades se retiran en la sala el mismo día de proyección.

El eje temático elegido para este año es “El futuro del trabajo”. El festival busca fomentar la creatividad y apoyar la difusión de obras audiovisuales que contengan historias acerca del trabajo y de los trabajadores, privilegiando sus puntos de vista sobre el mundo y sobre los temas de índole social que afectan sus tareas cotidianas, la vida de sus familias y la realidad de la comunidad a la que pertenecen.

El jueves 10 se proyectará el film de apertura en la sala Gaumont, a las 20, con entrada libre y gratuita: se trata del excelente film portugués La fábrica de nada, de Pedro Pinho, ganadora del premio FIPRESCI en el Festival de Cannes 2017.

Otros títulos que se destacan en la programación son Andrés lee i escribe (Chile), Los árboles del Albino (Japón), Historias del Sueño Americano (Austria), Calabria (Suiza/Italia), Detrás de los titulares (Reino Unido) y Ama-San (Portugal). Dentro de las películas argentinas recomendamos La vida sin brillos, Raídos, El aprendiz, Corralón y Paula.

El sitio oficial de Construir Cine es muy completo. Allí podrán descargar el catálogo y la grilla de programación.

martes, 8 de mayo de 2018

Olmi (1931-2018)


Por Ermmano Olmi*

"El arte de las armas es un concepto aristocrático, ignora la dimensión dramática del conflicto, sus repercusiones sobre las personas que se implican en la lucha, y se revisten de importancia en cambio otros aspectos que pertenecen a la especulación intelectual. La guerra se transforma en "justa", en "torneo", en un acontecimiento lúdico, no se llama guerra sino estrategia bélica,y pasa a ser una medida del talento, de la agudeza de los que planean la contienda. Definir la guerra como un arte presupone el olvido de que es algo obsceno, trágico, una lucha real, un cuerpo a cuerpo que deja cicatrices y mutilaciones que determinan cambios en la vida de los que en ella se ven implicados. Definir la guerra como arte es atribuirle una dimensión, por decirlo así, virtual , transformar en modelo, en maqueta, un escenario donde las piezas que mueven los príncipes y los poderosos son seres humanos con una historias cada uno de ellos, no un ejército de miniaturas."
*Fragmento de una entrevista publicada en la revista "El Ciervo" (enero 2003).
La imagen pertenece al film El oficio de las armas (Il mestiere delle armi, 2001), que cómo la aparición de las armas de fuego cambió la manera de concebir la guerra. Su director, el gran Ermmano Olmi, murió ayer a los 86 años.

sábado, 5 de mayo de 2018

20° BAFICI - Casa propia


Casa propia (Argentina, 2018)
Dirección: Rosendo Ruiz
Sección: Competencia Argentina

Establecerse. O al menos poder permanecer un día entero en el mismo lugar, sin sentirse expulsado. Sólo eso desea Alejandro. Tener una pequeña parcela de tiempo que sea realmente suyo. Para volver a mirar el cielo. 

Pero no. El protagonista de Casa propia no hace más que ir y venir en un vagabundeo forzoso y cada día más amargo. Alejandro (Gustavo Almada, preciso en todo) tiene cuarenta y pocos años. Vive en Córdoba con su madre, que está enferma y genera conflictos a cada minuto. Trabaja como profesor de literatura en un colegio secundario. A veces duerme con una novia que no termina de integrarlo en su intimidad. Tiene un gran amigo que está por irse a España. Y quiere empezar a alquilar un departamento, pero salir a buscar opciones implica soportar las obscenas arbitrariedades del mercado inmobiliario. Esta es la historia de un personaje de ficción y es también la historia del presente aplastante de un país llamado Argentina. Aunque lo intenta, Alejandro no puede hacer pie. Y no hay nada más agotador que flotar cuando no se perciben orillas ni tampoco un fondo al que se pueda llegar para después remontar. El protagonista viaja encapsulado en el colectivo y de repente toda la ciudad parece transformarse en una gigantesca pecera. Aunque no veamos el agua, la sentimos como una amenaza certera a través de los efectos sonoros de la película. Son demasiadas las frustraciones acumuladas. Algo está por desbordar. 



“Creo en los desafíos formales, porque es infinita la posibilidad que ofrece el cine de combinar planos con sonidos”, señaló el realizador Rosendo Ruiz cuando Casa propia se proyectó en el Bafici. La película está concebida desde el riesgo, y resulta especialmente estimulante por las modulaciones que el director se anima a ensayar en el trabajo con la enunciación. El relato comienza con un plano general que muestra a un grupo de adolescentes que escuchan música y toman fernet en la calle. Una chica del grupo llama la atención por lo bien que hace jueguito con una pelota de fútbol. Todo sucede dentro de un sereno plano-secuencia que, aparentemente, nos invita a observar el conjunto sin manipulaciones. Sin embargo, ni la chica de la pelota ni sus amigos serán los protagonistas del relato, sino un señor que pasa detrás de ellos y se detiene para golpear la puerta de una casa, a los gritos. Esa bifurcación perceptiva, que nos obliga a relocalizarnos inmediatamente en el espacio diegético, propone una estrategia inteligente: en una película marcada por los continuos desalojos (físicos y simbólicos), el primer sujeto desplazado es el propio espectador. 

 Ni siquiera podemos refugiarnos en este plano inicial del frente de la casa como un típico plano de establecimiento que nos guíe en la acción por venir. Porque el personaje pronto se va del lugar, sin activar una lógica exterior-interior en la construcción espacial de la escena (y recién más tarde sabremos quién es la mujer que habita esa casa). De hecho, no habrá otros planos similares durante el resto del film. La perplejidad se propaga. Algo se desacomoda. Un simple corte seco hace que la escuela se fusione con el hospital, o un truco visual revela que un impecable departamento a estrenar no era más que una maqueta en una clase de ciencias. Las reglas con las que el cine clásico solía agasajar la orientación del espectador carecen de sentido en una historia en donde los espacios se confunden, se fragmentan, se tornan hostiles. Hasta la música descoloca con su inesperada prepotencia épica, como si quisiera secuestrar al cansado protagonista para llevárselo exiliado a otra película, una que le regale peripecias dignas de un héroe triunfal (en esta línea uno recuerda ciertas decisiones de Hong Sang-soo en la reciente The Day After, por ejemplo). Algunas de estas búsquedas formales podrían haber generado cierta distancia con las emociones de la ficción, y sin embargo sucede lo contrario: la matriz autoconsciente del film no complica en absoluto la conexión con los personajes. La película consigue adherirnos poderosamente a la realidad de los vínculos y su contexto existencial. Será porque la angustia que emana de la historia resulta demasiado conocida para muchos de los espectadores. 

Casa propia es el mejor film de Ruiz hasta el momento. La película sorprende porque es impredecible en su estilo, cualidad que sólo puede funcionar como virtud cuando es el propio cineasta el que se niega a afincarse en un único territorio a la hora de crear. Un artista verdaderamente inquieto no va a encontrar nunca una residencia que sea la definitiva.

viernes, 4 de mayo de 2018

Hueco


Luz perdida en su cuerpo
Y en la huída un lecho
Vacío:
El mundo.


Víktor Gómez


En la imagen: Nadie nos mira, estupenda película de Julia Solomonoff.

martes, 1 de mayo de 2018

Buenas películas en el "Encuentro con el Cine Europeo", con entrada gratuita.

Del 2 al 8 de mayo se desarrollará la XV edición del “Encuentro con el Cine Europeo”, que tendrá como sedes principales a la Alianza Francesa de Buenos Aires (Córdoba 946) y al Instituto Italiano de Cultura (Marcelo T. de Alvear 1119). 

La muestra está integrada por 11 largometrajes y 12 cortos provenientes de 13 países: Alemania, Austria, Dinamarca, Eslovenia, España, Finlandia, Francia, Italia, Polonia, Portugal, Reino Unido, Rumania y Suecia.  

El ciclo se realizará en la Ciudad de Buenos Aires pero también en Mar del Plata y en las provincias de Tucumán, Mendoza, Córdoba, Santa Fe y Tierra del Fuego.

La entrada es gratuita.
 
A continuación se detallan las películas programadas en Buenos Aires:  

Miércoles 2 
20:00. Alianza Francesa
John From, de João Nicolau (Portugal, Francia / Comedia Dramática)  

Jueves 3  
18:15. Alianza Francesa 
Escucha (Listen), de H. Ramezan y R. Nyoni (Finlandia / Cortometraje) 
Long Story Short, de May el-Toukhy (Dinamarca / Comedia dramática)  

19:00. Instituto Italiano de Cultura  
Cortos del BFI Flare, el festival de cine LGBT de Londres (Reino Unido) 
Bodo, de Michał Kwieciński (Polonia / Musical)  

20:30. Alianza Francesa  
Tour de France, de Djaidani Rachid (Francia / Comedia dramática)  

Viernes 4
18:30. Alianza Francesa  
Baby Box, de Katariina Lillqvist (Finlandia / Cortometraje)
Ivan, de Janez Burger (Eslovenia / Drama)  

18.30. Instituto Italiano de Cultura
Bienvenido a Alemania, de Simon Verhoeven (Alemania / Comedia)  
Charla introductoria a cargo del crítico Pablo De Vita  

21:00. Instituto Italiano de Cultura  
Corto del BFI Flare, el festival de cine LGBT de Londres (Reino Unido)
Pequeños y torpes actos de cariño, de Mila Tervo (Finlandia / Cortometraje)

20:30. Alianza Francesa  
Drifters, de Peter Grönlund (Suecia / Drama)  

Sábado 5  
11:00. Alianza Francesa 
Corto del BFI Flare, el festival de cine LGBT de Londres (Reino Unido)
Last Shelter, de Gerald Igor Hauzenberger (Austria / Documental)  

Lunes 7  
18:15. Alianza Francesa  
Felices 140, de Gracia Querejeta (España / Comedia dramática)  

20:15. Alianza Francesa
Corto del BFI Flare, el festival de cine LGBT de Londres (Reino Unido) 
Fixeur, de Adrian Sitaru (Rumania, Francia / Drama)

Martes 8  
19:30. Instituto Italiano de Cultura
Fuocoammare, de Gianfranco Rosi (Italia, Francia / Documental)
Charla introductoria a cargo del crítico Néstor Tirri.

Para obtener más información sobre la muestra y las películas programadas, pueden consultar esta página.